Basada en la novela homónima de Harlan Coben, la nueva apuesta de Netflix España es El inocente, un thriller original que llega a la plataforma el 30 de abril. ¿Quién posee la verdad? Un juego de espejos desencadenado por una muerte accidental que llevará a un hombre (Mario Casas) a enredarse una red de la que difícilmente podrá salir.
Con un arranque poderoso, la serie de Oriol Paulo nos lleva a través de las voces de sus protagonistas a un viaje por los recovecos de la inocencia y la culpabilidad. Para ello, contará con un reparto de lujo: Mario Casas, Aura Garrido, Alexandra Jiménez, José Coronado, Ana Wagener, Susi Sánchez o Juana Acosta interpretan a personajes poliédricos que nos enseñarán sus múltiples caras.
Con ésta última, con Juana Acosta, tenemos el placer de hablar en Más de Cultura. Interpreta a Emma, una mujer atormentada por su pasado que conecta con el eje central de la trama. Sin desvelarles demasiado, prometemos que es mejor así, nos tomamos un tiempo para charlar con la actriz de su carrera. Su primer recuerdo con la interpretación tiene que ver con sentirse una mujer orquesta desde bien pequeña, ahora, reconoce que aunque fingir acentos lleva mucho trabajo, es algo que disfruta mucho.
Tengo la sensación de que a veces vamos demasiado rápido, por lo tanto: ¿Cómo estás?
Si, yo también tengo la misma sensación, vamos demasiado rápido y aún teniendo consciencia de ello es difícil cambiarlo; después del confinamiento me había prometido bajar las revoluciones y aunque lo intento me cuesta hacerlo; se me han juntado estrenos y empiezo a rodar en breve una serie. Estoy muy bien, contenta y afortunada por tener trabajo pero ¡a mil como siempre!
Normalmente en cualquier producción ya se rueda desordenado, pero en el caso de El inocente la propia trama es desordenada, ¿Cómo trabajas con el personaje para saber en todo momento dónde estás emocionalmente y no perder el hilo?
Esto es algo que se va entrenando con la practica y el oficio, reconozco que es increíble cómo podemos rodar las escenas en desorden y encontrar el punto emocional exacto para que el espectador pueda acompañar al personaje en su viaje.
De todas maneras siempre hago un trabajo previo muy preciso para tener claro el orden y el arco del personaje; a mi me gusta utilizar fichas para poder visualizar cada escena y esto me ayuda a ordenar en mi mente la historia que estoy contando.
Está basada en la novela de Harlan Coben ¿La habías leído previamente o preferiste ir de cero?
Preferí ir de cero, cuando la historia que tengo que contar esta basada en una novela como es el caso en de El inocente decido leer o no dependiendo del personaje que tengo que interpretar y del director . En este caso Oriol Paulo me recomendó no hacerlo y le hice caso.
En la serie vamos a conectar con los distintos personajes. Cuando a uno le toca interpretar un personaje totalmente contrario a lo que es, ¿Tienes herramientas para conseguir empatizar?
No sé si la palabra sea empatizar, me gusta mas pensar en comprender sus circunstancias para poder justifica su accionar. Es importante estar libre de juicios de valor para poder entrar en su imaginario y entender sus puntos de vista que por lo general son totalmente diferentes a los tuyos.
Y una vez que estás dentro ¿Te cuesta salir de los personajes?
¡Depende del personaje! Hay proyectos en donde me cuesta mas que en otros, muchas veces tiene que ver con los asuntos que me tocan personalmente, pero con el tiempo he aprendido a desconectar cada vez mas; a veces hago respiraciones profundas, otras veces una ducha de agua fría también me viene bien.
¿Cambia la Juana Acosta en cine que la de series?
Yo me entrego al trabajo de igual manera sea en cine o TV; con el mismo compromiso y amor por lo que hago. Sin embargo. aunque la línea ya no es tan marcada en algunos proyectos por la gran calidad que se esta consiguiendo en la TV, yo sigo siendo una enamorada del cine y por lo general siempre hay mas tiempo para poder profundizar en cada situación que plantea el guion en una película que en un capítulo de una serie.
Tú más que nadie sabe lo importantes que son los acentos en la ficción… En La templanza el reto no ha sido el de castellanizar el acento sino trabajar directamente otro distinto: el mexicano. ¿Cómo ha sido la experiencia?
Hacer un acento bien hecho es, por lo general, un reto muy grande para mi. No me gusta el trazo gordo y por eso le dedico muchas horas a esa parte del trabajo.
El castellano lo tengo bastante controlado porque llevo mas de 20 años viviendo aquí, pero cuando he tenido que hacer de Cubana, Salvadoreña o Mexicana lo he disfrutado porque me saca de mi expresión habitual pero el trabajo que supone es grande, muy grande.
Creo que también tienes algo entre manos con Apple TV. A nivel de actriz las plataformas están creando muchos puestos de trabajo, pero a nivel de espectadora ¿Cómo ves la “guerra” de las plataformas?
Creo que las plataformas están generando mucho trabajo y esto es súper positivo para la industria y para el espectador también; las propuestas son infinitas y eso hace que nos volvamos mas selectivos a la hora de elegir y de crear.
¿Tendrías en la cabeza el primer recuerdo relacionado con la interpretación?
Uno de los primeros recuerdos que tengo es preparando obras de teatro con mis amigas del colegio durante las vacaciones con el propósito de enseñárselas a nuestros padres. Recuerdo que lo hacíamos todo, desde el guion, el arte, el vestuario, ¡TODO! Un gran ejercicio creativo sin tener experiencia ¡Pero sí mucha imaginación!
¿Si no hubieses sido actriz qué habrías sido?
Posiblemente bailarina o artista plástica; estudié danza muchos años y también Bellas artes en la universidad.
¿Más de Cultura y menos de qué?
¡Más de cultura y menos ignorancia!
Deja tu comentario