El día 10 de octubre se celebra el Día Mundial de la Salud Mental y todos, en nuestro día a día, acompañados por el estrés que nos supone, luchamos por mantenerla.
En el cine muchos personajes han intentado retratar la falta salud mental, la mal llamada locura. Repasamos algunos títulos que cuentan con una protagonista femenina y que retratan estas situaciones.
No quiero perderte nunca
Paula, personaje inspirado en la propia historia personal del director, ha sufrido una pérdida muy importante. Tendrá que luchar contra sus propios fantasmas encerrada en una casa que ya no reconoce como suya y en la que su madre se ha perdido. Malena, la pareja sentimental de la protagonista, será la encargada de hacer de médium entre ambas para conseguir salvar a Paula de sí misma.
Carrie
Las películas que se han hecho sobre el personaje que escribió Stephen King nos dan una valiosa lección: siempre es mejor creer en tus principios, no en los de otros. Bajo la influencia de la poca salud mental su madre, la adolescente protagonista vive atormentada por sus compañeros de instituto. Sin poder contar con el apoyo familiar, un hecho traumático la llevará a vivir experiencias horribles.
Hard Candy
Aronofsky quiso jugar en esta película con la locura que lleva implícita una profesión con tanta exigencia como la de bailarina. Con El lago de los Cisnes como telón de fondo, vamos observando como una estupenda Natalie Portman es capaz de retratar cada momento de sufrimiento de una manera magistral para acabar por desconcertar también al espectador para que no distinga cual es la realidad.
Stoker
Parecido al argumento de Carrie, en el que la protagonista se ve envuelta en un aura de locura por las acciones de otros, es el de Stoker. Esta película cuenta con la presencia de Mia Wasikowska en el papel de protagonista. Tras fallecer su padre, el hermano de éste se instalará junto a ella y su madre. Sin embargo, ella irá descubriendo su verdadera identidad hasta el punto de perder su propia cordura.
Hierro
Dicen que la pérdida de un hijo es insuperable. Elena Anaya interpreta en este título a María, la madre que pierde a su hijo en un ferry. Tras comunicarle seis meses después que el cadáver ha sido encontrado en la isla, viaja hasta allí para luchar contra todo tipo de fantasmas.
Inocencia interrumpida
En los años 1967, muchas cosas que hoy son normales, eran consideradas locura. Susanna Kaysen, de 18 años, es enviada por sus padres al Hospital psiquiátrico Claymoore, allí, la película nos va guiando por distintas personalidades y personajes que retratan los distintos trastornos mentales que se pueden sufrir.
Son algunas películas que han contado con actrices valientes y capaces de ponerse en la piel de personas que padecen este tipo de conflictos en su día a día. Una vez más, el cine como herramienta para ilustrar la vida.
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