La cosa está chunga, para qué negarlo. Nos gusta comer jamón, a ser posible de Jabugo, claro, aunque acabamos comprando el de la ofertilla del Mercadona, que no es lo mismo pero nos apaña la cena. Lo malo es que comprando siempre el jamón en lonchas no aprendemos a cortarlo.
En esto de aprender Social Media hacemos igual. Nos han contado que este rollo está de moda, y que además no se cobra mal (¿¿¿¿????), asi que nos ponemos a buscar como locos formación que nos convierta en súperprofesionales de la noche a la mañana. Pronto nos damos cuenta de que los máster "pata negra" están muy por encima de nuestras posibilidades económicas, y optamos por un curso baratillo.