MARICÓN, AUTÓNOMO Y CATALÁN.
“Un albañil del dibujo”
José Antonio Roda. Cornellà de Llobregat 1987. Artista.
Illustration, design & others.
Entramos en el estudio de José A. Roda para conocer de una forma más cercana su mundo interior sin ningún tipo de tapujos. “Hago dibujos” simplifica su nada sencillo trabajo como artista, pero ello nos acerca a un chico que rehuye de las etiquetas y que se deja llevar sin ningún tipo de pretensión ante las cosas.
Podríamos estructurar la entrevista en tres partes vitales en la vida de una persona “Roda niño, Roda adolescente, Roda adulto” tal como teníamos previsto, pero nos dejamos llevar de la misma manera en la que él crea su mundo.
Cuando le preguntamos como ha sido su infancia nos destaca que: “Considero que ha sido bastante normal, jugando en el parque con mis amigas, recordando a mi abuela que me daba el bocadillo, a madre y padre. Fuera de la particularidad de niño marica, que no considero una cosa especialmente traumática, he tenido una niñez muy normal”. Intentamos indagar en alguna parte triste de su infancia, pero Roda no es un artista maldito, todo lo contrario. “Lo que más me gustaba eran los cantantes, la actuación, el cine y ser periodista. Aunque nunca creía que fuese capaz porque pensaba que no valía para todas esas cosas. Cuando estaba más formado quería hacer cine, pero finalmente terminé estudiando Comunicación Audiovisual”.
Entre sus referencias más tempranas y que a día de hoy siguen estando presentes, Roda nos cuenta: “Cuando era pequeño fueron las Olimpiadas de Barcelona 92 y recuerdo a Mariscal, el cual sigue siendo un referente. También el cine de Almodóvar, que aunque ya no lo tenga tan presente, el color, las formas, las figuras…siguen estando ahí”.
Cuando le preguntamos acerca de una película en concreto nos habla de Mi vida sin mí. “En 4º de la ESO hice un trabajo sobre ella. Es muy importante para mí porque tiene muchas cosas que llegué a buscar luego. Si vas más allá puedes investigar en quien es Deborah Harry, los libros que aparecen en la historia, la música de Omara Portuondo o Blossom Dearie…a nivel de referencias abrió un universo muy bestia para mí durante mucho tiempo”.
Pero a parte de Isabel Coixet también hablamos sobre Spice World, The Movie. “Me gustaban Mel B por el pelo y Mel C porque era la que cantaba bien, aunque yo de deportista no tengo nada”.
Retomando los estudios de Comunicación Audiovisual, en época universitaria, nos relata la experiencia de sus inicios: “Mi mayor desencanto con el Audiovisual fue el trabajo en equipo. Yo quería contar cosas y tenía una visión sobre ello, y hacerlo en equipo no lo facilitaba. Después estudié un postgrado de diseño gráfico aplicado a la Comunicación. Yo no conocía a ningún ilustrador, ni sabía que se podía vivir de hacer dibujos, hasta que conocí a Amaia Arrazola, la cual me llamó mucho la atención por su trabajo y su normalidad. Eso fue un punto de inflexión”.
Mientras seguimos conversando sobre diversas cosas de una forma espontánea, vemos bajo la luz de la ventana de su estudio reposando varias de sus obras, y queremos, enseguida, llevar todo ese mundo a nuestra casa. Así que formalizamos las preguntas hacia el asunto del trabajo y la creatividad. Roda es muy autoexigente y no se siente cómodo cuando le nombramos la palabra éxito: “Para mí esto es como empezar cada mañana. Es como una lucha, contra ti mismo y contra el exterior. Salir adelante con el autoempleo en un momento como éste es para suicidas. Hay proyectos que me han comprado ilustradores que me encantan y eso te crea un subidón, pero no puedes dejar de trabajar, aprender y hacer…si lo haces, dejas de existir”.
Hablamos durante un tiempo de sus últimos trabajos en los que incluyen desde pintar un coche #HyndaiKONA, Instagram para World Pride 2017, carteles de Lost &Found, hasta exposiciones en sitios como “El Diluvio Universal” en Barcelona.
En este punto, nos obligamos a pedirle que defina su trabajo en pocas palabras: “Es un reflejo de mi personalidad. Simpático, sencillo, inmediato, sin pretensiones, colorido y procuro hacer cosas monis. Mi padre es albañil y yo me considero un obrero de la ilustración. Es lo que he visto en mi casa”.
Como nos gusta tanto su sencillez y naturalidad queremos que nos explique su visión sobre “cosas monis”: “Si haces OH! cuando lo ves, es moni (entre risas). No hay nada más mariquita que decir qué moni…pero creo que otro mundo es posible, un mundo más simpático, más fácil y no tan de guays. Son cosas que cuando las ves te hacen sentir bien”. Pero tras ello, puntualiza: “Igual dentro de un año no es así mi trabajo. Ahora utilizo ciertos colores, pero no quiere decir que mañana pueda hacer cosas oscuras. Por ejemplo, en el pasado dibujaba iconos, pero esas figuras que hice en su día no las recibo con la misma perspectiva. Ahora tengo un lenguaje más propio y definido”.
Aunque la conversación avanza y ya estamos sumergidos en el buen rollo que nos transmite, no podemos dejar de preguntarle cómo visualiza su futuro. “Quiero seguir, a por todas. Me gustaría que algunos factores que entorpecen el trabajo fuesen menos duros. Pero quiero mejorar, hacer más cosas, que mi dibujo sea cada vez mejor. Pero también me gustaría cierta ayuda en las producciones que realizo, o en algún momento hacer algo editorial. No me pongo techo”. Tras ello, aunque esté lleno de vitalidad y no trasmita ninguna señal de lo contrario, le preguntamos si duerme bien por las noches: “No duermo tranquilo, porque soy muy sufridora. Me lo tomo todo muy en serio. Ahora estoy haciendo una faena que es para dentro de dos meses, pues hasta que no veo las cosas terminadas no descanso, aunque lo tenga medio resuelto. Este trabajo nunca termina, afortunadamente”.
Nos queda claro que Roda es una persona que se enorgullece de donde viene y que desea un futuro donde poder SEGUIR, en mayúsculas, y haciendo lo que más le gusta. Así que le pedimos que dibujara mentalmente su vejez. Vacilando durante unos instantes no dudó sobre ello: “Cerquita del Prat. Cerca de mi casa, del mar. Y con un jersey con pelotillas”.
Y finalmente explicamos el título de esta entrevista, debido a que la última cuestión que queríamos era que él mismo eligiese dicho titular. “Maricón, autónomo y catalán. (entre risas). Soy las tres peores cosas que puedes ser en este país y en este momento. No es por dar pena, al contrario, es por quitar hierro al asunto. Puedes ser las tres cosas y estar vivo”.
Antes de dejar su estudio, nos permite que le hagamos alguna foto. Enseguida colabora y con todo el entusiasmo coge cartulinas, recortes, y figuras para facilitarnos el trabajo. Al salir de su espacio lleno de luz, la ciudad nos provoca un jamacuco del bueno.
Entrad y nos entenderéis.
“Esta eres tú, los ojos cerrados, bajo la lluvia. Nunca imaginaste que harías algo así, nunca te habías visto como… no sé como describirlo, como una de esas personas a las que le gusta la luna o que pasan horas contemplando el mar o una puesta de sol. Seguro que sabes de qué gente estoy hablando… o tal vez no. Da igual, a ti te gusta estar así…” Ann. Mi vida sin mí. 2003.
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