La mitología clásica desembarca un verano más en la ciudad de Mérida. El Festival de Teatro Clásico de Mérida cierra este año su programación con la obra de María Zambrano, La Tumba de Antígona. Entre el 17 y el 21 de agosto se podrá disfrutar de esta obra en el Teatro Romano de la ciudad extremeña.

La tumba de Antígona

Nieves Rodríguez Rodríguez y Cristina D. Silveira versionan la obra de la autora María Zambrano sobre una de las figuras mitológicas más estudiadas en la historia del pensamiento.  El reparto está compuesto por Ana García, Cristina Pérez Bermejo, Elena Rocha, Lara Martorán, Camilo Maqueda, Mamen Godoy, Tania Garrido, Jorge Barrantes, Simón Ferrero, Sergio Barquilla, José Antonio Lucia y Francisco García junto con Aolani Shirin al violín.

“Antígona, en verdad, no se suicidó en su tumba, según Sófocles, incurriendo en un inevitable error, nos cuenta.” Con estas palabras inicia María Zambrano su obra La tumba de Antígona (1967), una pieza teatral que aúna filosofía y literatura.

La figura de Antígona se asocia a la resistencia y oposición. En la historia clásica se enfrenta a la ley y a Creonte para defender la sepultura de su hermano Polinicles. María Zambrano, intelectual, filósofa y ensayista española,  introduce la poesía en el estudio de la filosofía, cuestiona las acciones del ser humano y propone una reforma social.

Esta línea de pensamiento es la que se refleja en sus obras, como es el caso de La tumba de Antígona.

Estos ingredientes cuestionan el canon de manera radical, pues que Antígona no solo no se quita la vida, sino que encuentra espacios de tiempo en su delirio con los que poder renacer. ¿No estamos acaso ávidos de nacer del todo? ¿De encontrar razones del corazón a la sinrazón de los tiranos? ¿No tendremos enterrada viva una Antígona cada una de nosotras? El delirio en Zambrano es un lenguaje y una de las más complejas formas de su razón poética.