Fotografía: ©Alexandar Denic, Das Rheingold. Richard Wagner, Bayreuth Festspiele , Dir
Hasta el 15 de mayo la escenografía de vanguardia alemana se da cita en las salas de exposición de CentroCentro en Madrid. Un viaje por la tradición escenógrafa comprendida entre los años 1989 y 2019. Décadas, en las que la escenografía fue desempeñando un papel cada vez más importante en las prácticas y discursos artísticos.
En su recorrido, se pueden observar imágenes y documentación audiovisual de los diversos espacios escénicos, teatrales, dramáticos o escenográficos que han configurado numerosas obras y les han dotado de una dimensión nueva.
Surrealismo y paradojas arquitectónicas
El interés por la escenografía como práctica artística queda plasmado en este recorrido en el que se repasan las distintas corrientes, acompañadas de las biografías de sus creadores. Todos ellos pertenecientes a titulaciones prestigiosas de las mejores universidades de centro Europa.
Y es que esta última generación de escenógrafos alemanes ha sido considerada unánimemente como el mayor referente de la vanguardia internacional. Especializados en un trabajo que pretende hacer de lo real un principio ético y estético, para aportar a la escenografía una verdad y una autonomía que hereda y reformula el legado de las vanguardias performativas del siglo XX.
En este recorrido encontramos surrealismo, artefactos, dicotomías y paradojas espaciales. Tanto, que a veces se hace imposible no quedarse un rato detenido delante de los murales fotográficos para no dejar ningún detalle fuera de la vista.
También recreaciones de fenómenos naturales como la niebla o la lluvia. Entre los nombres a destacar, se encuentran las escenografías de Annette Kurz, Aleksandar Denić, Rebecca Ringst, Jan Pappelbaum, Bettina Meyer, Klaus Grünberg, Nina Wetzel y los colectivos Rimini Protokoll o el colectivo SIGNA.
Lo industrial y lo natural se unen en el diseño
La parte real que inspira a la escenografía la encontramos, por ejemplo, en el trabajo de Anna Viebrock, cuyas escenografías parten de la documentación de espacios reales done se observa reutilización, degradación y abandono.
La representación de fenómenos naturales corre a cargo de Katrin Brack. En su obra vemos instalaciones espaciales con reproducciones de lluvia, nieve, espuma o niebla.
Algo más industrializados se intuyen los paisajes escénicos de Bert Neumann, caracterizados por el empleo de materiales de construcción en bruto y la apropiación de elementos y objetos del ámbito comercial. También los de Rebecca Ringst, creadora de espacios autónomos marcados por las formas de la construcción industrial.
Medea von Euripides, Regie Barbara Frey, Deutsches Theater Berlin Schauspielhaus Zürich, Pfauen, 2006
El camp alemán, estilo basado en la ironía que ya repasamos por estas páginas, lo encontramos en la obra de Nina Wetzel. En él observamos la naturalidad con la que incorpora todos los elementos en este contexto.
También hay espacio para el cine, por ejemplo, el trabajo del diseñador de los decorados de la película Underground, Aleksandar Denić, también se encuentra incluido en esta muestra. Una suerte de escenarios que se presentan como apocalípticos pero de una belleza y desconcierto extremos.
Pero no todo son obras de artistas individuales. La muestra repasa también el trabajo de SIGMA y Rimini Protokoll, formados por varios artistas de la misma corriente estilística.
Esta muestra de arte vanguardista se puede disfrutar de manera gratuita hasta el 15 de mayo en CentroCentro en Madrid.
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