La temporada de bodas sigue en pleno apogeo, y es que los fines de semana desde abril hasta octubre se llenan de enlaces matrimoniales. Que si tu compañera de trabajo, tu amiga de la infancia, o tu primo el neoliberal (como dice Cariño), que levante la mano quien tenga entre 27 y 40 años y no haya tenido una boda este verano.
Por ello, en Más de Cultura hemos querido hacer un repaso a las películas en las que las bodas también son protagonistas.
Cuatro bodas y un funeral
La primera de todas y sin lugar a dudas es “Cuatro bodas y un funeral”. Un clásico de la comedia inglesa con un Hugh Grant increíble. Un soltero sin compromiso que tras conocer a una mujer en una boda se la encuentra en otros eventos sociales… en cuatro bodas y un funeral. Qué razón tiene la frase que de una boda, sale otra boda. Nos promete risas y alguna que otra lágrima.
El padre de la novia
Seguro que esta la hemos visto mil veces (sobre todo en televisión a media tarde). En “El padre de la novia” Steve Martin ve como su hija de 22 años se quiere casar con su novio. Este padre protector que se convierte en el peor enemigo del novio de su hija, nos divierte durante toda la película. Casi resulta la precursora de la saga “Los padres de ella”.
La boda de Muriel
La frase de “Eres mala Muriel” seguro que nos recuerda esta fantástica comedia australiana. Una película obligatoria de ver en la cultura pop. Divertida y tierna a partes iguales, en “La boda de Muriel” nos enamoramos de Toni Collete, de su inocencia, de su gran cantidad de catálogos nupciales y de las canciones de Abba, por supuesto.
Mamma Mía
Y siguiendo con Abba, no podíamos dejar fuera “Mamma Mía”. Los paisajes griegos, la música, la alegría y el buen humor. Todo esto es lo que transmite esta película. La sencillez y el ambiente campestre nos encantan en la decoración y en la novia de esta película. Y por supuesto, Meryl Streep.
Mi gran boda griega
Ya que estamos en Grecia, también nos viene a la memoria “Mi gran boda griega”. Una película aparentemente independiente pero que cosechó gran éxito. La historia, como muchas otras, chica conoce a chico, se gustan y se quieren casar, pero ¡ah, sorpresa! Él no es griego, lo que pone a la familia en contra de esta unión. Mucho humor para esta película.
La boda de mi mejor amigo
No nos podíamos olvidar de la novia de América, y además por partida doble. Julia Roberts fue (y sigue siendo) un acierto a la hora de crear una comedia romántica. Con “La Boda de mi mejor amigo”, nos hizo pasar un buen rato a los espectadores, pero no tan bien a Cameron Diaz. Cantamos, reímos y también lloramos un poco.
Novia a la fuga
Unos años después, Julia Roberts se puso de nuevo el vestido de novia en “Novia a la Fuga” para compartir protagonismo con Richard Gere. Una divertida película que se presentaba como la nueva “Pretty Woman”, pero que no llegó a esta popularidad. Nos deja, eso sí, varias escenas divertidas y el reencuentro de estos dos actores.
Rosas Rojas
Quizá no es una película de bodas, pero sí que todo empieza en una de ellas. “Rosas rojas” nos cuenta una historia algo distinta a las anteriores. Y es que el día en el que Rachel (el personaje de Piper Perabo) y su prometido se van a casar, ella a Luce (Lena Headey), la florista encargada de la decoración de su boda. Este encuentro pondrá patas arriba la vida de la recién casada y nos muestra el lado romántico de Cersei Laninister.
Y hasta aquí este repaso nupcial de cine. ¿Alguna película que creas que falta en el resumen?
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