El Día de la Salud Mental se conmemora el 10 de octubre de cada año, y pretende ser una fecha marcada en el calendario para visibilidad todo lo relacionado con la salud mental. En el imaginario colectivo, tenemos muy relacionado la salud mental con la enfermedad mental, pero esta manera de negativizar los conceptos no hace más que poner palos en las ruedas a la situación.

En este 2019, el Día Mundial de la Salud Mental quiere centrarse en la prevención del suicidio, a través de una campaña cuyo lema es “Conect@ con la vida”. La prevención del suicidio es una tarea en la que todas las personas están implicadas. Desde Más de Cultura hablamos hace unos días de una obra de teatro para la prevención del suicidio, pero hoy queremos ir un poco más allá, con tres libros que leer por el Día Mundial de la Salud Mental.

Los renglones torcidos de Dios

Los renglones torcidos de Dios de Torcuato Luca de Tena es un clásico cuando hablamos de libros que tratan la salud mental. Publicado en 1979, hay que acercarse a su lectura con distancia, pues el lenguaje y algunas maneras de contar situaciones pueden hacer que nos echemos las manos a la cabeza o nos asombremos, pero hay que tener en cuenta que los años han pasado.

¿De qué trata Los renglones torcidos de Dios? Esta novela nos cuenta la historia de Alice Gould, una mujer que ingresa en una institución mental. Su delirio le hace creer que es una investigadora privada que ha sido ingresada para investigar diversos casos. Durante la lectura, tanto los personajes que se van cruzando con ella, como el propio lector no sabe si es cierto o no lo que se está contando sobre la salud mental de la protagonista.

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El hombre en busca de sentido

El hombre en busca de sentido de Viktor Frankl es otro de los libros imprescindibles para poner el foco en la salud mental. En El hombre en busca de sentido nos encontramos una reflexión sobre lo que realmente le da sentido a nuestras vidas. El escritor, doctor y psiquiatra analiza en estas páginas las respuestas que sus pacientes le han dado a una sencilla pregunta “¿Por qué no se suicida usted?”.

En esas conversaciones se asientan las bases para comprender nuestro pensamiento y aquello que sirve como salvavidas cuando lo hemos perdido todo. El encontrarle sentido y un objetivo a la vida de aquellos pacientes y lectores que se asomen a esta obra es la misión que perseguía Frankl con este título.

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¿Ya soy normal?

¿Qué hacemos con aquellos lectores más jóvenes? Como en tantas ocasiones, cuando hablamos de diversos temas siempre pensamos en adultos, pero no hay que olvidarse de los adolescentes que pueden necesitar saber más sobre la salud mental. Por ello, la última propuesta es una novela juvenil de Bourne Holly, ¿Ya soy normal?.

¿Ya soy normal? es una novela que nos lleva a conocer la vida de Evie, quien sólo quiere ser una cosa en la vida: normal. Una historia sobre amistad, secretos, adolescencia, un instituto nuevo, donde la salud mental también tiene importancia en el relato.

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Elegir solo tres libros para hablar de la salud mental es complicado, por eso queremos leerte, ¿tienes algún libro obligatorio cuando se trata de salud mental que no hayamos nombrado?