«Nicotina, Nico para las amigas», así presenta Rocío Mesa a una de las protagonistas más especiales de su ópera prima Secaderos. Nico es una criatura mágica que nace de las hojas de los secaderos de tabaco. Un monstruo con el que la directora fantaseaba de pequeña, cuando paseaba y jugaba entre secaderos en la Vega de Granada. Ahora esas imágenes que acompañaron su niñez han cobrado vida gracias a Nico, la criatura que protagoniza su película.

Quién es Nico

El estudio de efectos especiales DDT, capitaneado por David Martí y Montse Ribé, han sido los responsables de dar vida a Nico. Un estudio acostumbrado a las super producciones, habituales del cine de Guillermo del Toro o de Bayona. Son los creadores de algunos de los monstruos más famosos del cine, como El laberinto del fauno o Un monstruo viene a verme.

Cuenta Rocío Mesa que trabajar con David Martí y Montse Ribé no entraba en sus planes, ni en el presupuesto inicial de la película, que no podía asumir los costes de la creación de Nico. Sin embargo, en cuanto el guion de Secaderos llegó a DDT, David y Montse lo tuvieron claro, querían involucrarse en la película. Habituados a trabajar con criaturas más oscuras o proyectos con maquillajes y procesos más realistas, el mundo de la fantasía no es tan habitual para ellos, no obstante, es uno de los que más disfrutan. Por ello decidieron hacerse productores asociados de la película y entraron en el proyecto de Secaderos.

La primera imagen de la Nico era una fotografía del marido de Rocío, vestido con hojas de secaderos, en una escapada que realizaron a la Vega de Granada. A partir de ahí, empezó un proceso de creación que se alargó durante un año. Había algunas pautas que tenían claras. Nico tenía que estar alejada de la masculinidad, que es lo que tradicionalmente se ve en el cine en este tipo de criaturas. La ternura era el late motiv sobre el que trabajaban. Todo un reto para el equipo, que acabó diseñando una criatura animatrónica, sin brazos ni piernas y vestida por infinidad de hojas hechas con aleaciones de seda y membranas de silicona para conseguir esa sensación de ligereza.

El realismo mágico de Secaderos

Nico es una de las causantes de bañar de fantasía y realismo mágico la película Secaderos. La ópera prima de la directora granadina Rocío Mesa que ya se puede ver en cines.

Secaderos cuenta la historia de Vera, una niña de siete años que vive en la gran ciudad pero pasa las vacaciones en el pueblo de sus abuelos, una zona agrícola donde se cultiva tabaco. Su verano comienza con una emocionante aventura: descubre una fascinante criatura gigante en el abandonado secadero de tabaco de sus abuelos. Nieves es una adolescente que se siente enjaulada en ese pueblo. El padre de Nieves es una de las pocas personas que quedan en la zona cultivando tabaco. Tanto Nieves como Vera se embarcan en aventuras paralelas, conectadas a la criatura mágica, que cambiarán la forma en que ven su propia realidad.