Fotograma obtenido de la emisora Chilled Cow

Sonidos nostálgicos de los ochenta, discos de vinilo y la resonancia de las radios y los medios anticuados crean un tipo de música que va en contra de los ruidos más depurados en los que podemos apreciar hasta el último arreglo. El lofi (low-fidelity) se mueve entre un estilo de producción y un género musical que apuesta por la baja fidelidad de grabación y arrasa entre los millenials en estos últimos años.

En Youtube sus listas de reproducción son infinitas, las estaciones de radio emiten las 24 horas al día los siete días a la semana y hasta C. Tangana se ha sumado a la moda del lofi en una de sus últimas canciones, Bien 🙁.

El carácter lofi

El concepto lofi no es algo nuevo. A pesar de que estar ahora en auge, el lofi siempre ha estado presente en la industria musical y en la manera de producir música. El estilo lofi está asociado a las grabaciones de los ochenta, los casetes, un remix de sonidos grabados en equipos viejos y de mala calidad que sirven como sello de autenticidad. Tintes de hip hop y jazz que tienen como resultado sonidos relajantes.

Contraria a los estándares de sonidos extremadamente depurados representativos de la música hifi (alta fidelidad), el lofi se impone en internet como un gigante que acumula millones de reproducciones. Gracias a los canales de reproducción 24/7, el lofi ha ido ganando terreno en la red y sirve como banda sonora para muchísimos millenials, sus ritmos relajantes sirven hasta para usar como fondo de estudio.

Además, los estudios de grabación caseros hacen que muchos artistas independientes produzcan este tipo de música y creen un mercado underground en el que las redes sociales sirven como herramienta para compartir sus creaciones. No hace falta tener miles de seguidores, un chaval desde Nueva York con 300 seguidores puede inspirar a una joven en España con 600 para crear música en lofi, compartirla y alimentar la industria. Empieza a funcionar un mercado a pequeña escala, fuera de presiones de sellos y discográficas, altos presupuestos y contactos.

El ejemplo más sonado es la radio Chilledcow, con más de cinco millones de seguidores. Esta radio emite en directo y sin interrupción todos los días de la semana.

La estética visual del lofi

Los videoclips o animaciones que se asocian al lofi hip hop también se pueden agrupar bajo unas mismas características. Imágenes con aspecto manga y un solo plano en el que parece que no pasa nada. En contra de la sobrecarga de estímulos, coreografías trabajadas y planos infinitos a los que estamos acostumbrados, la estética visual lofi se caracteriza por estar protagonizada por un mismo plano en el que sutilmente van cambiando los objetos.

Lo podemos apreciar en los dos ejemplos mencionados en el artículo, tanto en la imagen de portada de Chilled Cow como en el videoclip de C. Tangana Bien :(.

Una forma de producir música que se clasifica poco a poco como un nuevo estilo al que se suman muchos artistas.