Otro verano más que no te vas de vacaciones. O por lo menos no esas vacaciones soñadas. Así que en Más de Cultura, para intentar echarte una mano ante esta situación te proponemos que si no puedes viajar a Italia este estío, que sea Italia la que venga a verte.
¡Y qué mejor que viajar a través de la gastronomía! La propuesta de hoy quiere llevarte hasta Vecchia Milano una trattoria italiana a la que querrás volver.
Situada en la Calle Marqués de Urquijo, 21, Vecchia Milano es un restaurante italiano de estilo rústico. Un restaurante pequeñito que resulta un refugio ideal en el barrio de Argüelles. Su decoración deja ver las paredes de ladrillo, manteles rojos, fotos en blanco y negro… y todo esto acompañado de carteles de la Scala de Milán. Ya sin necesidad de probar un plato, ya me han convencido a base de ópera.
Pero sigamos, y vayamos a lo importante: su comida. Todo lo que puedas probar en Vecchia Milano te dejará sin palabras. En su amplia carta puedes disfrutar de pizzas (de esas con masa fina e ingredientes de primera calidad); pasta de todo tipo, forma y sabor; y la mejor cocina de Italia. Pero si aceptas una recomendación, levanta los ojos de la carta y presta atención de lo que te cuenta el camarero.
Porque en Vecchia Milano preparan unos “fuera de carta” que quitan el sentido. Pastas variadas, platos del día y recomendaciones con las que es imposible fallar. Déjate guiar y recomendar. Pero si hubiera que escoger de entre toda esa carta, hay un plato que sobresale: Fusilli al tartufo, suaves y sabrosos. De esos platos que se los pide un comensal, pero al final el resto acaba pinchando de su plato.
Y para terminar, postres caseros como el siempre acertado tiramisú. Para ponerle el broche de oro a una comida italiana de verdad. ¿Hay italianos más baratos en Madrid? Sí. ¿Hay pizzas por cuatro duros en el mercado? También. Pero nada de esto es comparable con Vecchia Milano que presenta una relación calidad-precio buenísima. Tanto es así que la sensación que tienes cuando te levantas de la mesa y te despides del personal es que pronto vas a volver a verlos.
En resumen, si este año no te has podido ir de vacaciones y necesitas darte un capricho, vete a disfrutar de la gastronomía italiana a Vecchia Milano. Quizá lloras por tu mala suerte, pero por lo menos lo harás con la tripa llena.
Vecchia Milano, el sabor de Italia en Madrid
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