¿Dónde vamos a vivir? es un documental sobre feminismo y vivienda, dirigido por la periodista Georgina Cisquella. Un documental que quiere poner en valor la lucha de las mujeres frente al drama de los  desahucios.

¿Dónde vamos a vivir? es una producción de Centuria Films y La Interferencia con guion de Georgina Cisquella y Rafael Lobo, distribuido por Begin Again Films.

Se trata de un nuevo título de Georgina Cisquella que tras su última película documental, Hotel Explotación: Las Kellys (disponible en Filmin), la periodista y directora vuelve a profundizar en la fuerza y la labor de los movimientos activistas protagonizados por mujeres.

¿De qué trata DÓNDE VAMOS A VIVIR?

¿Dónde vamos a vivir? es una película que rinde homenaje a la resistencia y persistencia de los movimientos sociales a través de los testimonios de sus protagonistas, mujeres que han sido afectadas por desahucios y que, mediante su experiencia, hacen una radiografía del problema de la vivienda en España.

La directora, Georgina Cisquella, siguió durante tres años a asambleas y plataformas de vivienda. Allí conoció a las protagonistas de ¿Dónde vamos a vivir?. Ellas relatan en primera persona las situaciones a las que se han tenido que enfrentar, la problemática de la vivienda, el papel de los bancos, de la Sareb y de las instituciones y empresas mediadoras. Muchas de ellas, mujeres en situación de vulnerabilidad, migrantes, víctimas de malos tratos, exponen en el documental una realidad que cada vez afecta a más personas.

En palabras de la directora, la periodista Georgina Cisquella: «El problema de la vivienda es muy grave para miles de familias en general, pero es especialmente duro y penoso para las mujeres vulnerables en particular. Mucha gente se cree que los desahucios han desaparecido porque algunos agitan el fantasma de las ocupaciones y se olvidan de que la burbuja del alquiler ha sucedido a la de la crisis hipotecaria, que los fondos buitre han invadido el mercado, y que España está a la cola de Europa en vivienda social.
Durante el rodaje constaté que las mujeres siempre están en primera línea, en la puerta de un desahucio y en la defensa del derecho a la vivienda. Ellas son las protagonistas de nuestra película. Más de una década reclamando políticas efectivas para conseguir que la vivienda sea un derecho, tal como reconoce la Constitución Española, y no una mercancía para especular».