En este momento en el que todos tenemos de todo (porque hemos arrasado en el Black Friday), pero tenemos que hacer una lista de deseos para los amigos invisibles y regalos familiares, se agradece que Dirty Pop aparezca con ideas que querrás en cuanto las conozcas.

Pero empecemos por el principio. ¿Qué es Dirty Pop? Se trata de una concept store cuyo universo gira en torno a la cultura pop y al apoyo al colectivo LGTBIQ. Gracias a esta mezcla, en Dirty Pop encontramos arte, moda, cultura y mucho más en una pequeña tienda de lo que querrás todo.

Dirty Pop se encuentra en la calle Gravina, en el madrileño barrio de Chueca. Tras el mostrador nos encontramos a Víctor Serrano Alonso, creador de este establecimiento que siempre nos recibe con una sonrisa en los labios. (True story, las distintas diferentes ocasiones en los que he pasado por ahí, siempre he recibido la mejor atención).

En el catálogo de artículos que encontramos en Dirty Pop hay desde libros hasta prendas de ropa, pasando por piezas de ilustradores. De este modo, en sus estanterías se mezclan camisetas con la palabra “Mariconez” en la pechera, tote bags de “Call me by your name” con “Ni puta ni Santa. Las Memorias de La Veneno” o recortables de David Bowie. Pero además de marcas como Tom of Finland o Selebrities, en Dirty Pop tiene su propia firma de ropa: camisetas, sudaderas y slips para llevar esta visión pop y LGTBIQ por bandera.

Un listado de productos que querrás apuntar a tu wish list.

En resumen, Dirty Pop es una tienda que, como diría Ángel Sanchidrián, te la recomiendo si te gustan las canciones de *NSYNC, quieres convertirte en una aspirante a RuPaul´s Drag Race, y cuando desaparezcas de la faz de la Tierra quieres viajar hasta San Junipero.

Porque si estas Navidades te van a regalar calcetines, mejor si son de Beyoncé, ¿no?