La cosa está chunga, para qué negarlo. Nos gusta comer jamón, a ser posible de Jabugo, claro, aunque acabamos comprando el de la ofertilla del Mercadona, que no es lo mismo pero nos apaña la cena. Lo malo es que comprando siempre el jamón en lonchas no aprendemos a cortarlo…

En esto de aprender Social Media hacemos igual. Nos han contado que este rollo está de moda, y que además no se cobra mal (¿¿¿¿????), asi que nos ponemos a buscar como locos formación que nos convierta en súperprofesionales de la noche a la mañana. Pronto nos damos cuenta de que los máster «pata negra» están muy por encima de nuestras posibilidades económicas, y optamos por un curso baratillo de unas cuantas horas, donde nos prometen «todos los secretos». Con unas «lonchitas finitas» de redes sociales tenemos suficiente, y nos vamos a casa tan contentos.

Mala idea.

Si os vais a gastar dinero en formaros por lo menos preocuparos de que os ofrezcan lo que pagáis. Si haceis un cursillo de pocas horas aseguraros de que os van a enseñar algo que no se pueda aprender leyendo un tutorial, y si podeis permitiros el máster de precio infinito, mirar bien que al menos la bolsa de trabajo no sea de papel mojado…

Aún así la formación nunca es suficiente, amigos, es necesario que pongáis todos esos ilustres conocimientos en práctica cuanto antes. Difícilmente alguien va a confiaros la gestión de su comunidad si no sois capaces de crear y gestionar una comunidad propia desde cero, y no me refiero a abrir una cuenta en Twitter y seguir a Santiago Segura…Más bien deberíais hacer algo así:

  • Crearos un blog, uno dedicado al jamón, por ejemplo. Puede ser uno gratuito, un WordPress, igual hasta os atrevéis a instalarlo en un dominio propio, diseñarlo al gusto, y todas las semanitas escribiros un par de post sobre este apasionante tema…, oye, al final esto del blogging engancha…
  • Trabajaros una estrategia original, ser creativos. Pasad de tanto esquemita que anda por ahí, cada plan de social media es único porque cada proyecto es único. No hay secretos ni fórmulas mágicas. Ya nos gustaría…
  • Empezad a compartir los contenidos de vuestro blog en Facebook, por ejemplo, creando una bonita FanPage personalizada, y aprended pronto que tener 1.000 fans no es tarea fácil…
  • Haced unos cuantos videos caserillos de cómo se corta jamón correctamente y colgarlos en un canal YouTube, viralizarlos ya es más complicado pero habrá que intentarlo…
  • Crearos una cuenta en Twitter, generar una estrategia que os convierta en referente del sector del jamón estableciendo relaciones con gente interesada y con autoridades en el tema. Id a por un Trendin Topic navideño, quizá #YoCortoElJamonComoNadie…
  • Abrid una cuenta en Pinterest, que es lo más ahora, y llenad vuetros boards de bonitas fotos de paletas y paletillas varias, colar algo de cecina…. Igual una cuenta en Instagram tampoco es mala idea.
  • Ya para rizar el rizo aplicad a vuestro blog algo de técnicas SEO básicas, quizá incluso atreveros a gastaros unos eurillos en Google Adwords…a ver qué pasa.
  • Hay que probar y volver a probar todas las herramientas de Social Media que estén a vuestro alcance (o sea, gratuitas), para que al final podáis quedaros con aquellas que os hagan el trabajo más fácil. No hay una herramienta mágica multiusos, o por lo menos no la han inventado todavía.
  • Y monitorizarlo todo. Comprobad al cabo del tiempo si los objetivos marcados se han cumplido o no… y reflejarlos en un bonito informe que luego podreis enseñar en vuestra próxima entrevista de trabajo. Un bonito blog y miles de fans-followers que certifican que algo sabéis de social media. No hay mejor currículo.

Así que en el fondo da igual que os gasteis miles de euros en un máster «supermegaguay» o unos cuantos céntimos en un curso de dos horas, en ninguno os van a enseñar todo lo que necesitas para ser un profesional.

Y es que a cortar jamón se aprende con el cuchillo en la mano.