Los exhibidores siguen trabajando para que el público entienda que la vuelta a las salas de cine es, ahora mismo, uno de los planes de ocio más seguros para seguir accediendo a la cultura. Sin embargo, ante la crisis del Covid-19 a la industria del audiovisual no le ha quedado más remedio que reinventarse y aunque las reinas en el mundo de las plataformas las conocemos todos, hay otras, con una apuesta por el catálogo más arriesgado, que han surgido este año. Es el caso de Spamflix.

Una apuesta para los amantes de lo bizarro, el terror, las películas de festivales como Festival Internacional de Cine de Sitges.  Julia Duarte es fundadora de esta una nueva plataforma de cine de género y en nuestra charla con ella nos reconoce que no cree que el mercado esté copado de contenidos como los suyos: «No creo que el mercado de las plataformas esté saturado, hay muchas que se crean pero al mismo tiempo hay muchas películas que no se estrenan en salas o que salen pronto de cartelera y son difíciles de encontrar».

En ese sentido destaca especialmente que su catálogo se basa en eso, en películas que son difíciles de encontrar y por eso tienen una línea editorial muy clara: «A nosotros nos gusta el non-sense, la comedia negra,  la animación para adultos, el cine de género o de culto… La gente que va a Spamflix es lo que va a encontrar».

Se nos hace curioso entonces pensar en lo difícil que debe ser para un gestor de contenido encontrar precisamente todo ese cine «difícil de encontrar», para lo que Duarte apunta que «es un catálogo bastante personal. Son películas que hemos visto Markus Duffner en, por ejemplo, festivales. Es un trabajo muy grande de búsqueda, ya tenemos los lanzamientos hasta final de año pero seguimos en proceso de búsqueda».

La plataforma también incorpora un apartado de inscripción de películas donde el usuario tiene la oportunidad de enviar películas que son valoradas por el equipo de selección.

La batalla por las cifras, la más difícil de librar, sobretodo siendo una plataforma independiente como lo es, por el momento, Spamflix: «El camino es lento, comenzamos a desarrollar la plataforma en 2015, se publicó en 2018 y ahora estamos con el lanzamiento de la app. Va creciendo mucho y vemos cómo a la gente le gusta. Que hacía falta una plataforma como esta».

Sobre los nuevos retos, Julia tiene claro que giran en torno a aumentar el catálogo, llegar a nuevos territorios y el desarrollo de juegos o interacción con el usuario: «Queremos estrenar una película a la semana en todos los territorios y desarrollar los juegos para que la aplicación sea más interactiva y trabajar en la producción original. Estamos co-produciendo ya un documental con Israel».