De nuevo Google demuestra ser único a efectos prácticos de nuestro día a día. Quizá ya ha probado su última novedad, pero si no es así porque le pilló de vacaciones, su vuelta al trabajo va a ser un pelín más relajada.

Google Maps predecirá y, por supuesto se lo contará, cómo van de abarrotados metros y autobuses y usted mismo valorará si le conviene montar en el siguiente, porque Google le dirá si lleva asientos libres o no. A partir de ahí la decisión es suya.

La fórmula que utiliza Google está basada en los datos y valoraciones que realizan los usuarios en la propia app. Un modo sencillo y fiable para, entre todos, contribuir a cierta comodidad, un crowdsourcing como otro cualquiera.

El otro elemento que provoca comprensible estrés entre los usuarios de transporte público, es el retraso en la llegada de los autobuses, sensibles a los atascos, obvio. De nuevo Google Maps está presente para diluir esa presión informando, en tiempo real sobre el retraso, el tiempo previsto y la llegada del siguiente autobús.

No podrá deshacer el atasco, pero denle tiempo.

Hay otra funcionalidad,  muy interesante para evitar cierto sedentarismo, ante una situación francamente irresoluble, Google  no se rinde ya que además ofrece la opción de conocer las rutas más rápidas combinando transporte público y tren de San Fernando –un ratito a pie y otro caminando, je.

Ya ven, Google está empeñado en ser nuestro aliado imprescindible y, desde luego, lo está consiguiendo.

De momento la funcionalidad que hoy comentamos, está presente en 200 ciudades de todo el mundo. Ciudadanos de Madrid, Barcelona, Valencia, Sevilla o Granada ya pueden probarlo a su vuelta de vacaciones. Porque reconozcámoslo, en agosto el transporte público casi que da gusto.

Ya saben, este año la vuelta a la rutina será más leve, porque las aglomeraciones quieran que no, nos hacen un poco más infelices y Google ha decidido que no hay ninguna necesidad.