La primavera asoma y con ella el ciclo reproductor de las aves “trogloditas”. Estas son aquellas que necesitan agujeros en los árboles para poder construir sus nidos. Debido a la deforestación y a la hostilidad en las ciudades para muchas especies, resulta cada vez más difícil que puedan encontrar refugios donde nidificar. Por eso, vamos a compartir contigo una serie de consejos que desde SEO Birdlife nos recomiendan a la hora de colocar una caja nido en casa.

Materiales necesarios para construir nuestra propia caja nido

Los materiales que necesitaremos para construir nuestra propia caja nido serán: madera, clavos y tornillos. Lo ideal es utilizar contrachapados, es decir, tableros compuestos de varias planchas de madera que se pegan unas sobre otras como si fuera un sándwich. Así, nuestra construcción resistirá durante más tiempo a los cambios bruscos de temperatura que, en el caso de la madera maciza, provocarían que esta se combara y se rajara con más facilidad.

Para ensamblar estos tableros de contrachapado, será necesaria la utilización de clavos y tornillos para reforzar las uniones. Una vez cortados los tableros y ensamblados, con una broca para agujeros, crearemos la entrada principal de esta vivienda en las alturas. El tamaño del diámetro de esta entrada no es baladí, ya que en función del tamaño del que lo hagamos, entrarán a vivir unas especies u otras. Todos los tamaños se encuentran detallados en la propia página de SEO Birdlife.

¿Dónde la colocamos?

Otro de los puntos importantes a la hora de colocar nuestra caja nido es el lugar. Ojalá no tuviéramos que decirlo pero es primordial situarla en un sitio inalcanzable para los viandantes, ya que si no lo hacemos, nos arriesgamos a que alguien pueda destrozarla. No es necesario colocarlas a una gran altura pero sí debe estar por encima de los tres metros.

Tampoco con una orientación que quede totalmente expuesta al sol en las horas centrales, en climas cálidos como el nuestro puede ser letal. También resulta atractivo para las aves el hecho de que nuestra casita esté rodeada por algún tipo de planta trepadora como la hiedra, en el caso de que la anclemos a la pared. Y si hemos decidido colgarla, mejor engancharla a una rama (con un tope en los extremos para que no resbale en los días de viento).