Llevamos prácticamente dos meses confinados y durante todo este tiempo hemos comprobado de primera mano cómo es estar aislados del mundo dentro de una casa. Vale que los paseos nos salvan la vida pero todos echamos de menos poder estar con gente con la que no convivimos. Ahora, imagínate vivir en un lugar totalmente remoto lejos de la civilización.

Si te cuesta sobrellevar tu aislamiento prepárate para descubrir algunos de los lugares más remotos habitados dentro del planeta. Además, si eres del grupo que ha descubierto su yo interior durante el confinamiento y ha visto que eso de vivir aislados del mundo no está tan mal puede que esta lista te dé un par de ideas para próximos viajes.

Tristán da Cunha

Este pequeño archipiélago situado en el Atlántico Sur ocupa el primer puesto al ser el lugar habitado más remoto de todo el planeta.  Fue descubierto en 1506 por el navegante portugués Tristán da Cunha, quien le dio nombre.

Está compuesto por tres islas que se encuentran a 3.360 km de Sudamérica y a 2.816 km de Sudáfrica. La isla principal, que tiene el mismo nombre que el archipiélago, tiene un pequeño asentamiento, Edimburgo de los siete mares.

En él viven menos de 300 personas que descienden de las mismas siete familias. La sociedad es endogámica y de los dieciséis ancestros originales, cinco eran asmáticos, por lo que Tristán da Cunha tiene la tasa de asma más alta del mundo.

No hay aeropuerto y para llegar hasta la isla hay que hacerlo en barco. Por cierto, solo hay un barco que sale 8 veces al año con lugar para 12 pasajeros y tienen prioridad residentes y familiares de residentes, así que conseguir llegar hasta allí es toda una odisea. La televisión no llegó hasta el año 2001 y los teléfonos fijos no lo hicieron hasta 2007. Para descubrir más curiosidades de este peculiar lugar presta atención a este hilo de twitter de @Azul_Mistico.

La Rinconada

Se trata de una ciudad ubicada en los andes peruanos. A 5.300 metros sobre el nivel del mar es considerada la ciudad más alta del mundo, para que te hagas una idea, La Paz, en Bolivia, está a 3.640 metros sobre le nivel del mar, así que ya te puedes imaginar quien es el protagonista del día a día de sus habitantes, el mal de altura. La Rinconada es uno de esos lugares en los que echarse una carrera es practicamente imposible.

Viven entre 50.000 y 70.000 personas y las condiciones climáticas son muy duras. La mayoría de sus habitantes son mineros que trabajan buscando oro. Los servicios públicos son muy escasos y no hay sistema de alcantarillado así que el olor de sus calles es muy fuerte. Tampoco cuentan con un sistema de recogida de basuras y los restos se acumulan por el espacio.

Alert

Es un pequeño asentamiento a 817 km de Polo Norte. Está considerado el asentamiento humano permanentemente habitado más septentrional de la Tierra. Según el censo de 2006, sólo cuenta con seis habitantes que ocupan una base militar y también una estación meteorológica del Servicio de Meteorología de Canadá. El pueblo más cercano está a 2.092 kilómetros y Quebec queda a más de 4.000 kilómetros de distancia, así que nada de vida entre vecinos o fiestas de pueblo. Alert está cubierto de nieve diez los doce meses del año y su temperatura máxima no alcanza los 5 grados. Eso sí, las auroras boreales no faltan.

Kerguelen Islands

Las Islas Kerguelen, situadas en el océano Índico, es otro de esos lugares remotos que nos cuesta encontrar en el mapa, son posesión de Francia y por eso forman parte de las Tierras Australes y Antárticas Francesas. Están a 3.218 kilómetros de distancia de la punta más meridional de África y solo puedes llegar a ellas en un barco que únicamente realiza el viaje 4 días al año.

No hay población indígena y sus únicos habitantes son un centenar de científicos franceses y sus familias que acuden durante el verano austral por lo que su presencia es temporal. El clima frío y las aguas procedentes de la Antártida hacen que entre su fauna podamos encontrar focas, leones marinos, lobos marinos, pingüinos, renos y hasta cerdos europeos.

Ittoqqortoormiit

Es una de las poblaciones más remotas de Groenlandia y solo se puede llegar hasta ella en barco o helicóptero. Fue fundada en 1925 por Ejnar Mikkelsen y cerca de 70 colonos. El asentamiento fue impulsado por Noruega, que tenía intereses coloniales en la época. Gracias a la caza de focas, ballenas, osos y morsas el asentamiento prosperó.

Hoy en día el turismo mantiene la economía del asentamiento y muchos curiosos van hasta allí para disfrutar de las auroras boreales aunque las bajas temperaturas y el hielo del mar hace que sea imposible llegar hasta allí en barco durante 9 meses al año.

Ahora que conoces algunos de los lugares más remotos del planeta, el confinamiento no parece tan duro, ¿no?