Seguro que a ti también te ocurre. Pese a que no tienes problemas con la mayoría de los términos del castellano hay otros, que por su similitud o la única variación de una de sus letras con el mismo sonido, siempre generan dudas a la hora de escoger una opción y otra.

De este modo, si quiero expresar que voy a dibujar una línea, ¿Estoy escribiendo una ralla o una raya? Si quiero decir que determinada persona está al mando de algo, ¿Tengo que escribir que lo dirige o lo dirije? ¿Qué pasa cuando una palabra tiene varios significados en función de la letra que usemos? Para tratar de resolver algunas de las dudas más comunes cuando se trata de letras parecidas o sonoramente similares, aquí una guía a modo de repaso por aquellas dudas comunes en el castellano que pueden llevarnos a equívocos.

La LL por la Y

Un atajo para esta habitual dicotomía es entender el significado de la palabra. Así, se escribe “raya”, cuando nos referimos al sustantivo femenino que se utiliza para hacer referencia al dibujo de una línea. Se escribe “ralla” cuando hablamos del verbo “rallar”. En concreto, a la segunda y tercera persona perteneciente al singular de presente, a modo indicativo del verbo rallar.

La G por la J

En este caso, no se trata tanto de que existan varios términos correctos con diferentes significados, sino que en muchos de los casos sólo es válido uno de ellos y el otro es incorrecto. Para esto, la Fundéu determina lo siguiente:

Se escriben con g todas las palabras que llevan como prefijo el geo- (como geografía), las que terminan en -gen, -gélico, -genario, -géneo, -génico, -genio, -génito, -gesimal, -gésimo, -gético y sus femeninos y plurales, -gia, -gio, -gión, -gional, -gionario, -gioso y -gírico o -ger y -gir como origen, angélico, sexagenario, fotogénico, magia, proteger…etc.

Por el contrario, las terminaciones que llevan -jería, son propias de la j, como conserjería o cerrajería. También los verbos cuyo infinitivo lleva esa letra tales como cruje de crujir o trabaja de trabajar y las palabras derivadas de otras que también llevan j, como cajita de caja.

Con o sin H

La hache, por su carácter mudo, es otra de las letras que generan conflicto en nuestra ortografía. A menudo, vemos como hay problemas para determinar cuándo escribir “Haber” o “A ver”. Ocurre lo mismo que con la LL y la Y, lo mejor es siempre comprender el significado de cada expresión para no llegar a un equívoco.

Siempre y cuando va sin H, nos referimos a toda expresión que lleva implícito el verbo “ver”. Una secuencia siempre constituida por la preposición “a” y el infinitivo del verbo “ver”. Así, se presenta en tono interrogativo, expresa interés, llamada de atención e incluso en ocasiones es sinónimo de expresiones como “claro” o “naturalmente”.

Por otro lado, “Haber” puede ser verbo o sustantivo. Cuando se trata de la primera opción, se utiliza como auxiliar seguido de un participio (Tiene que haber sucedido algo). En el caso de la segunda, se emplea como infinitivo del verbo impersonal que denota la presencia de lo designado por el sustantivo que lo acompaña (Parece haber un chico aquí).

Separado o junto

Los “porqué” también suelen generar conflicto. ¿Se escribe junto o separado? Si lo pensamos en términos interrogativos. El “Por qué” separado implica pregunta y el “porque” junto denota respuesta.

Sin embargo, también encontramos un tercero: “porqué”, que es un sustantivo masculino que equivale a causa, motivo, razón, y se escribe con tilde por ser palabra aguda terminada en vocal: “No comprendo el porqué de tu actitud”.

Son algunos de los errores o dudas habituales. Sin embargo, lo más recomendable siempre es consultar las fuentes como Fundéu o RAE, donde se resuelven de manera sencilla, y practicar la repetición para asumir dichas palabras como norma.