¿Es el orgasmo la única razón por la que disfrutamos del sexo? ¿El satisfyer nos ha cambiado la vida? ¿Conocemos realmente nuestro cuerpo? ¿Hay un botón mágico para tener orgasmos? El sexo forma parte de nuestras vidas pero el desconocimiento sobre el cuerpo humano, los tabúes y la falta de información todavía nos impiden disfrutar con libertad la sexualidad.

En Más de Cultura hemos hablado con Marta Torrón, fisiosexóloga, que trabaja para mejorar la vivencia sexual de sus pacientes. Una especialidad dentro de la fisioterapia y la sexología desconocida para muchos y que se centra tanto en la parte emocional como en la parte física.

Me imagino que muchas personas tendrán dudas sobre tu trabajo, ¿qué es exactamente la fisiosexología?

La fisiosexología es una rama de la fisioterapia que se encarga de rehabilitar o mejorar la función erótica de las personas. La sexualidad tiene dos funciones diferenciadas, la función reproductora y la función erótica, la capacidad que tenemos de sentir y de obtener placer. La fisiosexología es una rama de la fisioterapia que se encarga de mejorar que seamos capaces de sentir y obtener placer.

Digo mejorar porque a veces no hace falta tener una disfunción para poder beneficiarse de lo que aporta la fisiosexología. Los síntomas o los problemas más frecuentes en la mujer son la dificultad de llegar al orgasmo, el dolor en la vagina, la dificultad de lubricar y la falta de ganas, la falta de libido. Son los grandes bloques en los que podemos ayudar mucho a una mujer.

¿Qué diferencias hay con la ginecología?

La ginecología y la fisioterapia son miradas distintas de una misma cosa. Gracias a trabajar conjuntamente desde el área de la medicina podemos entender y ayudar mejor a la persona. La gran diferencia entre la fisioterapia de suelo pélvico y la ginecología es que esta última está entrenada para cuestiones orgánicas. Que no haya una infección, que no haya heridas… toda la parte funcional no la sabe ver. El fisioterapeuta es experto en el músculo, esto mismo pasa con la fisioterapia de suelo pélvico y la fisiosexología.

Cuando estás tratando a tus pacientes, ¿cuál es el primer obstáculo al que te enfrentas?

Es algo muy personal. Cada persona tienen sus propios obstáculos, esto es lo bonito. No te puedo dar una respuesta concreta. Puede haber personas que su mayor obstáculo sea que al empezar a trabajar con el cuerpo se les muevan un montón de recuerdos y de emociones. En otras el obstáculo puede ser económico.

«Muchísimas mujeres viven con la idea de que el cuerpo es más de los demás que suyo»

¿El dolor en relaciones sexuales y la incapacidad de llegar al orgasmo son los principales motivos por los que acuden a ti tus pacientes?

Sí, podemos decir que el dolor en las relaciones sexuales o incapacidad para llegar al orgasmo, esos son los grandes mundos con los que nos encontramos muchas mujeres a causa de la falta de educación, información y referentes en estos temas.

Enseñas a las mujeres a llegar al orgasmo, eres una especie de oráculo. 

Jaja. Trabajo de la forma opuesta. Si un oráculo es quien tiene información, sabiduría y te dice qué hacer. Yo tengo información porque lo he estudiado. Lo único que me diferencia de mis pacientes es eso, haberlo estudiado. Yo voy a transmitir el conocimiento para que tú te hagas dueña de tu cuerpo. Cuando conocemos cómo funciona algo podemos hacer que funcione mejor.

¿La masturbación juega un papel fundamental en nuestro crecimiento sexual y corporal?

Sí. La masturbación es un hecho natural del cuerpo pero lo vivimos con un montón de capas, de juicios, de miedos, de tabúes. Hablo de masturbación y de placer. La capacidad de sentir placer sexual va a hacer que estemos equilibradas corporalmente, emocionalmente y socialmente. En la fisiosexología se habla de estos tres niveles. Hacer que una mujer conozca métodos y maneras para sentirse dueña de su cuerpo y de su placer va a hacer que esté equilibrada en estos tres niveles.

Aquí hay un temazo, muchísimas mujeres viven con la idea de que el cuerpo es más de los demás que suyo. Desde la sexología en general pretendemos centrar y ordenar toda esta serie de creencias e informar para rellenar esos huecos vacíos y que cada una sea capaz de liberarse del dolor, de experimentar orgasmos, de sentirse equilibrada.

En los últimos meses el satisfyer está en todas las conversaciones ¿esto nos ayuda a las mujeres a explorar la sexualidad o tiene mas desventajas?

No es una respuesta fácil de sí o no. Todos los juguetes son bienvenidos y me parece una propuesta interesante. No puede ser la única forma en la que accedemos a nuestro cuerpo. Previo creo que tiene que haber un conocimiento, el saber activar nuestras vías de placer. Cambiar cosas como que el objetivo no sea el orgasmo sino activar el placer y dejar que dure. Cuando todo eso está un succionador es maravilloso pero si todo eso no está y el único acceso que tengo a mis genitales es con un succionador directo al clítoris que me trae un orgasmo super rápido es que me estoy perdiendo todo lo interesante. Por eso no es un sí ni un no. Es un sí pero hace falta una base.

¿Existe algún ejercicio mágico que deberíamos practicar a diario?

Existen varios ejercicios pero según lo que suceda son unos u otros. Si hay dolor en la vagina y tenemos el tono alto no recomiendo hacer hipopresivos pero si el tono está bajo sí lo recomiendo. Por eso digo que no hay una serie de ejercicios para todas. Es importante que una fisiosexóloga pueda hacer una valoración personal. En general solo oímos hablar de los Kegel y de las bolas chinas. Esto es muy limitado al montón de herramientas poderosas que existen. Hay cosas básicas como un masaje en la vagina o conocer nuestra vulva.