Últimamente todo se ha teñido de Navidad. Las calles, los supermercados, las conversaciones, los artículos de Más de Cultura… todo tiene un halo navideño. Porque hasta los anuncios que se cuelan en nuestro día a día tiene ese toque de Navidad durante estas fechas. Y no, no hablo solo de los anuncios de televisión de grandes marcas como IKEA o Loterías y Apuestas del Estado, sino de todas esas campañas que se crean en estas fechas.

Porque no hay que ser un gigante de la mercadotecnia para hacer tu propia campaña de Navidad y darle un extra a tus clientes, amigos y seguidores. Las PYMES suelen ser las grandes olvidadas cuando hablamos de publicidad, inversión y campañas, pero lo que es cierto es que todo comercio hace un esfuerzo extra en este mes. ¿Qué te parece si además de poner espumillón en el escaparate de tu establecimiento haces algo más?

Empecemos con los descuentos. Vale que ahora la temporada de rebajas cada vez es más difusa, pero siempre es positivo hacer una compra más barata. Los descuentos siempre son atractivos y en Navidad, más. Además, puedes enfocar esos descuentos a artículos que puedan ser regalos, para ayudar a tus clientes a la hora de comprar los presentes para su familia. Gracias a tus indicaciones encontrarán antes el regalo, y además, más barato.

Hemos hablado de los clientes, pero en Navidad es mejor hablar con ellos. Gracias a las herramientas de Email Marketing cada vez es más sencillo poder interactuar con nuestros contactos. Crear campañas de correo electrónico es una de las herramientas más efectivas para mantener las relaciones con nuestros seguidores. Esta Navidad puedes enviarle esos descuentos de los que hablábamos un poco más arriba, pero también una selección de los mejores productos, un recordatorio de los momentos vividos o una carta emotiva agradeciendo su apoyo. Todo depende del tipo de relación y producto que tengas entre manos.

Humaniza tu marca. ¿Qué significa esto? Que se vea que detrás del logotipo hay personas. Muchas veces nos perdemos en mensajes serios, cuando lo que más gusta es ver quién está detrás. Aprovecha estos momentos para hacer equipo, o para poner en marcha alguna acción de responsabilidad social corporativa. Porque algo que gire en torno a tu marca puede convertirse en un gesto de buena voluntad.

Y todo esto que hemos ido desgranando (desde el espumillón hasta la obra caritativa) lo tienes que contar en Redes Sociales. Imagínate una comida de Navidad, conversaciones aburridas y cuñados opinando, la única opción es refugiarte en feed de Instagram y dejar que llegue el turrón. Pues ahí es donde tiene que aparecer tu marca para desearle Felices Fiestas a tu seguidor.

Porque lo que queremos es que estén con nosotros, y si ahora tenemos que estar en Internet, pues estaremos.