Salomé Medina Lorente, firma con los dos apellidos porque «es hija tanto de su padre como de su madre», tiene 25 años y pertenece a esa generación que por un mundo laboral convulso y agresivo está en una especie de “vacío o limbo”. Es consciente de que aunque con esfuerzo se consiguen las cosas, cuando uno no consigue lo que busca, se genera cierta frustración que es negativa: “en nuestra generación nos metemos mucha presión por cumplir con las expectativas de los demás”.

Por eso de que el “fracaso” es esa etiqueta que se nos pone en la frente, ella prefiere luchar contra todas las etiquetas de la sociedad a través de sus textos. En Londres desde hace unos años pero natural de Bigastro, en Alicante, nos enseña su visión de la literatura juvenil, sus ideas y nos introduce en el fascinante mundo de los booktubers, que, según ella, han venido para quedarse.

Empezó escribiendo en el instituto con fanfictions «que los llaman ahora», y siguió en la universidad como una manera de desconectar: «Me daba por escribir por las noches». Su compañera de habitación tuvo que sufrir la luz del flexo muchas madrugadas mientras desarrollaba sus ideas.

Estudió Comunicación Audiovisual y esta materia está ligada a su forma de escribir, o tal vez al revés, porque aprovechó los “tips” que le daba la carrera sobre cómo crear una obra audiovisual y  éstos le dieron las claves de cómo pasarlo al papel. «Probé con guiones, pero me faltaba algo, más descripción, más sentimientos, más emociones… me interesan más las novelas o los ensayos».

«Cuanto más cerca está lo que escribes de la realidad, más buena es la ficción»

Ahora mismo está mas enfocada en la literatura adolescente o, como los llama ella, “adolescentes tardíos”, esa etapa en la que estás lejano de los «dieci»… y más cercano en los veinte, pero sus textos pueden ser leídos por gente más mayor: “bebo mucho de lo que me rodea, de la sociedad. Me gusta dejar una huella en el lector. La historia no es el tema central.”

Temas sociales, feminismo, identidad sexual o abuso son  los pilares en los que se asienta su literatura: “personajes con trasfondo capaces de llegar a los adolescentes porque les haya pasado lo mismo”.  Una mezcla entre novela, ensayo y reflexión en la que hace falta que un lector valiente “rasque” para sacar la realidad: “Cuanto más cerca está lo que escribes de la realidad, más buena es la ficción”.

“Me gusta escribir para ayudar a los demás pero también para hacerles sentir algo”. Porque también hay espacio para la crítica de las clásicas historias de adolescentes y sus romances. Cree que muchos fomentan las relaciones tóxicas. Ella prefiere educar en nuevos modos de contar historias basadas en el respeto.

Los personajes que más le apasionan son los fuertes y femeninos porque cree que en la historia de la literatura no han existido demasiados personajes fuertes femeninos ni escritoras referentes, muchas de ellas escondidas tras un pseudónimo. Por eso le gusta darles ese hueco en sus letras.

Se considera feminista “hasta las trancas” pero encuentra feminismo y falta de feminismo por todas partes. Para ella, una heroína en la ficción debería poder ser, simplemente, ella misma “por el simple hecho de ser mujer puedes hacer lo mismo que si eres un hombre. Creo que hemos estado siempre muy condicionadas en todos los ámbitos y sectores por ser el sexo débil. En el período Regencia empezó a haber protagonistas femeninos fuertes que reivindicaban un espacio en la sociedad como Jane Austen o personajes como Elizabeth Bennet en Orgullo y prejuicio o Anne Elliot en Persuasión, que marcaron un antes y un después en la literatura de esa época”. Una heroína de la ficción que de un paso adelante para tener su propia vida y resolver sus propios conflictos sin un hombre que la ayude o la mantenga.

Como objetivo de verano, la preparación de un libro, para lo cual viaja acompañada de la editorial Fun Readers, sita en su lugar de origen, en Alicante.  “Es una editorial muy pequeñita que se centra mucho en cada obra y en los detalles para personalizar cada libro”. Sobre la novela, y cuidando de no hacer spoilers, nos adelanta que está especialmente enfocada para esos “adolescentes tardíos” y que se encuentra a caballo entre la novela y el ensayo, en el terreno en el que se siente más cómoda.

Una revisión de la literatura actual con un protagonista femenino principal que está dando los primeros pasos en el terreno de la literatura y también está descubriéndose a sí misma.  Le gustaría, que más que ser un libro destinado a la simple venta, fuese también una novela aplicada a los colegios o institutos.

¿Qué son los booktubers?

Además de desarrollar su pasión por escribir y por la Comunicación Audiovisual, combinó su conocimiento como lectora con su deseo de compartirlo con otros para sumarse al carro de Youtube y coquetear con el terreno de los booktubers que ella misma define como un “influencers sobre literatura”.

Considera que es una ventana fantástica para la juventud y, por qué no, un método para conseguir fomentar la lectura entre los nativos digitales: “no es lo mismo que te presenten una reseña en unas líneas, porque ahora mismo no tenemos tiempo de nada y la capacidad de atención es más escasa en los jóvenes. Una ventana para conectar la parte digital con la parte literaria a la que a muchos adolescentes les cuesta más llegar”.

Además, destaca como condición de éxito la edad de los booktubers, más cercana para un adolescente que la del crítico literario que suele ser mayor, y cree que han venido para quedarse.

 

Realizando estos vídeos y experimentando un trabajo que reconoce que es muy duro (por el tema de organizar la subida de vídeos y gestionar comentarios y “me gustas”, por no hablar del temor a los haters), ha aprendido mucho. Empezó comedida por el tema de aportar demasiada opinión en sus vídeos y por estar, por primera vez, delante de la cámara y no detrás. Pero adquirió tablas para saber expresar mejor, tanto ante la cámara, como sobre el papel. Aunque ya se conocían de antes, la propia reseña de uno de los libros de la editorial que ahora le brinda la oportunidad de publicar, le abrió las puertas para emprender el proyecto de su novela.

Como esta joven autora nos cuenta, en nuestros tiempos, nunca se sabe, pero lo importante es el esfuerzo por hacer lo que uno quiere. Por eso:

-Salo, ¿más de Cultura y menos de qué?

-Más de cultura y menos de anónimos y seudónimos modernos que impiden que las mujeres tengan voz, imagen y palabra en una sociedad que por momentos parece seguir olvidándose de ellas.