La mejor pareja cómica vuelve a la carretera. Su último bolo lo organizó el Grupo PRISA y en él se volvieron a tratar muy bien, de maravilla, pelillos a la mar. Al verlos recuerdas ese colegueo de diputados en el Congreso. Da igual el partido al que pertenezcan, o si son de izquierdas o de derechas, en la tribuna sus señorías se despellejan vivos pero en los pasillos hay buen rollito y se saludan tan amigos.

Todo el que no haya estado en coma sabe que Faesmino y Cascado se llevaban a matar, pero ahí estaban, dos colegas de conferencia de alto standing, dos que pasan a la historia. Ya, pasan por la corrupción sistémica, ministros encarcelados, una guerra criminal, una descarada manipulación mediática, la burbuja inmobiliaria, las privatizaciones, la estafa del rescate bancario, la Gürtel, la caja B, los negocios con Gadafi, Filesa, la traidora entrada en la OTAN, los GAL, Rumasa, Juan Guerra, Luis Roldán, el desmadre autonómico… pero pasan.

Faesmino dijo en el bolo: “Yo también me siento del régimen del 78”. El del famoso “Váyase, señor González”, soltó lo siguiente: “Felipe González lo hizo bien”. Y luego obsequió a la audiencia con su famosa sonrisa de hiena estreñida para decir: “¡Mira que te animábamos a que dejases la Moncloa pero no había manera!”. La monda.

En el bolo, “moderado” por la directora de El País, no se les preguntó por la corrupción, por una verdadera separación de poderes o si es hora, tras más de cuatro décadas, de preguntar si queremos monarquía o república. Pero no hubiese tenido ninguna gracia porque eso, bien lo saben ustedes, es “romper el consenso histórico”.

Ahí estaban Faesmino y Cascado, tan amigos, impartiendo cátedra como si nada hubiera pasado, como si nunca se hubiesen odiado a muerte, como dos nostálgicos amigos que han compartido (además de puertas giratorias y sueldazos vitalicios) camerino durante años.

Lo que caracteriza a este dúo cómico es su desvergüenza. Y también que saben que el que hace la historia también la cuenta, que para eso tienen al Grupo PRISA y a todos sus medios afines y agradecidos.

Pero hubo un tiempo en el que en este país hubo medios libres. Hace décadas, en el famoso programa La clave Antonio García-Trevijano dijo ante el estupor de los presentes: España es una “oligarquía” u “oligracia”, no una democracia. Todos los partidos se parecen y la división ya no es entre derechas o izquierdas, ni entre capitalismo y comunismo. Es entre el político y sus lacayos. A la larga la gente se reirá de la diferencia entre izquierdas y derechas”. Vaya si nos reímos.